TREMENDA GRANIZADA

Carlos Lobato. Hacía tiempo que no se veía caer granizo de la manera que lo ha hecho hace unos momentos, pero el día ya llevaba un rato presagiando la tormenta. Poco a poco se empezó a nublar y el viento iba avisando de que una tormenta se acercaba; esto, junto con el frío, han desembocado en la tormenta de granizo que acaba de caer, que aunque corta, apenas ha durado unos diez minutos, ha sido bastante intensa, cayendo unos granizos de un tamaño considerable, aunque no estaban demasiado cuajados y se derretían en la mano.

Granizos en la calle

Durante la tormenta

Granizos en el patio

Un puñado de granizos en la mano

Pero, ¿cómo se forman los granizos? Veamos una explicación breve:

La explicación física de la formación del granizo es que, en grandes nubes de tormenta, núcleos de condensación alcanzan temperaturas inferiores a 0º C. Estos nucleos de hielo se mantienen en suspensión en la atmósfera en zonas de mucha humedad y bajas temperaturas, y empiezan a crecer hasta que pesan lo suficiente para caer. Pero en estas grandes nubes, cumulonimbos, que llegan a tener un espesor vertical muy grande, de hasta 10 Km, las fuertes corrientes verticales de aire son capaces de elevar de nuevo el granizo hasta alturas donde hace más frío, volviéndose a congelar otra capa de agua que lo recubre. Este proceso se repite varias veces hasta que el granizo alcanza un tamaño tan grande que le impide mantenerse en la nube, o el empuje del viento hacia arriba cesa, y entonces caen al suelo. 

Granizos en la azotea

Más granizos en la azotea

Granizos en una montera

Las nubes que quedaron tras la granizada